Como todos los domingos que toca salida, quedamos en Guzmán: María Jesús, Javi, Gabriela, Álvaro, Adelino, Mateo, Félix, José Antonio, Arantxa, Roberto y Toño. También participó Miguel Ángel, al que recogimos en el pantano de Barrios de Luna.
El objetivo era subir al Pico Morronegro, que nos había quedado pendiente por las fuertes nevadas del invierno.
En Torrestío disponen de una señal de tráfico autóctona: "gallinas sueltas"... O como interpretó el jurista del grupo: "urogallos sueltos"...
El valle de Valverde posee expectaculares vistas de Picos a ambos lados.
A lo lejos podíamos divisar el impresionante Pico Morronegro, llamativo por su altura y su estampa piramidal.
Una vez llegados a la collada de Quexeiro, salvamos el primer desnivel subiendo a La Pialda, un pico que es la antesala a la subida final al Morronegro. Detrás se puede observar Peña Solarco y el grupo de la Calabazosa.
La última rampa es la más dura.
Después del esfuerzo, la alegría por llegar a la cumbre!!!
Foto de grupo con un montañero asturiano y su perro que nos acompañaron en la subida
Bajando de la cumbre
Vistas desde la cumbre del Morronegro hacia Torrestío
Todavía había abundante nieve.
Vistas de las Ubiñas y Torrebarrio
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