EN
ESTE PRIMER DOMINGO DE OCTUBRE NOS HEMOS IDO A LA ZONA DE SAJAMBRE PARA
ASCENDER A PEÑA NIAJO, UNA CUMBRE DE FÁCIL ACCESO PERO GRAN DESNIVEL DESDE
DICHA COMARCA.
(NOTA: Pinchando sobre las
fotos pueden verse con la calidad original)
De nuevo hemos parado en Riaño
a tomar un café antes de proseguir el viaje hacia Pío de Sajambre. Dejamos
atrás el pantano cada vez más mermado y en el mirador de la parte baja del
Pontón nos sacamos una foto con la peña de fondo.
Tras dejar a dos compañeras en
Oseja, el resto seguimos hasta Pío dónde comenzaríamos la ruta.
Salimos por un camino que para colmo descendía hacia el arroyo. A su
altura cruzamos un puente cercano a un antiguo molino y emprendimos la larga y
fuerte subida hacia la collada de Llaete, 700 metros por encima. Entre el
bonito bosque ganamos altura dejando atrás una fuente en la que repusimos
líquido. No faltaron tampoco las zarzamoras de las que recogimos sus frutos.
Poco a poco fuimos contemplando más paisaje entre la arboleda y así alcanzamos
la collada mencionada.
Desde ella vimos ya la cumbre
de Peña Niajo, 300 metros por encima y tras el Porro Cervaliza. Por un sendero
bien marcado nos encaminamos hacia ellas deteniéndonos unos minutos a la sombra
para tomar un tentempié. Bordeamos el Porro hasta la collada intermedia desde
la cual nos restaba una fuerte subida pero no muy larga. Cerca de la loma caían
verticalmente las paredes Norte de la peña.
Alcanzamos la cumbre con una vistas espectaculares de picos y pueblos en
redondo. En ella nos acomodamos para comer y en ello estábamos cuando fuimos “atacados”
por una marea de hormigas voladoras que a algunos nos hicieron levantar. Nunca
había visto tantas juntas en una cumbre.
Tras un buen descanso en esta cima emprendimos el descenso por el mismo
sendero. Desde la collada algunos decidimos subir al Porro Cervaliza, cumbre
que alcanzamos en escasos diez minutos. Descendimos de él por la loma contraria
para enlazar con el sendero principal que nos bajó a la collada de Llaete en
pocos minutos. Cercana a la misma se encuentra una majada a la que bajamos un
grupo.
Ya por el ancho camino fuimos perdiendo altitud hasta llegar a un desvío
hacia Pío por un sendero señalizado. Nos metimos por un bonito prado de
helechos y luego entre arboleda dónde encontramos algunas majadas más. El
sendero nos llevó al camino principal a la altura del puente y del molino.
Nos quedaba ahora la subida hasta el pueblo durante la cual tuvimos una
bella postal de Peña Beza y el Jario iluminados por la luz anaranjada del
atardecer.
Ya en Pío nos cambiamos y nos
dirigimos hasta Oseja dónde estaban nuestras compañeras en la terraza de un
bar. A ellas nos unimos para pasar un buen rato degustando el bizcocho que una
de ellas nos había llevado, además de una empanada. Así se termina una buena
jornada.
Tras una
foto de todo el grupo emprendimos el regreso a León ya anochecido por completo.
Qué ruta mas interesante...precisamente este fin de semana tenía pensado acercarme a la Peña Niajo. Espero que el tiempo nos de un respiro.
ResponderEliminarEnhorabuena por el reportaje fotografico, es fantástico
Saludos
Merece la pena. Aunque solo sea la ruta hasta el collado ya es una maravilla entre el bosque otoñal.
ResponderEliminarUn saludo